Las clasificaciones de clase climática te ayudan a determinar las temperaturas y/o los niveles de humedad en los que el frigorífico puede funcionar de forma óptima.
Si la clasificación climática del aparato no coincide con el clima de su ubicación, corre el riesgo de consumir más energía.
También podría no enfriar el contenido a la temperatura adecuada.
La ubicación de su aparato, por ejemplo si va a estar en un ático caluroso o en una habitación con aire acondicionado, también afectará directamente al funcionamiento de su frigorífico.
La clase climática de la norma internacional IEC 62552-1 para aparatos de refrigeración domésticos va de Subnormal (SN) (10-32°C) a Tropical (T) (16-43°C).
Para los productos comerciales, la clase climática puede tener un número que tenga en cuenta la temperatura máxima de funcionamiento y la Humedad Relativa (HR).
Por ejemplo, un frigorífico con la clase climática 5 de la norma ISO 23953-2 puede funcionar eficazmente en un clima con una temperatura de 40°C y una Humedad Relativa del 40%.